Dominique Pelicot vuelve a ausentarse de su juicio por violación a su esposa en Francia

Dominique Pelicot, acusado en Francia de drogar a su esposa por una década para abusar de ella con la ayuda de varios desconocidos, no se presentó este lunes al juicio de gran interés público debido a que tenía que “someterse a una operación médica”.

“No está en condiciones. Tiene que someterse a una operación médica esta tarde. Le concedí el permiso para ausentarse hoy. Mañana decidiremos”, señaló el juez presidente en el tribunal de Aviñón, en el sur de Francia, Roger Arata.

Pelicot, que cuenta con 71 años, pasó por un chequeo médico el viernes, el cual estaba programado desde hace varios días. Su abogada, Béatrice Zavarro, comunicó a AFP que todo salió “bien” y que su cliente asistiría el lunes al tribunal.

Anteriormente, el acusado ya había faltado una semana a mediados de septiembre debido a problemas intestinales, hasta que el tribunal tomó ciertas medidas, como proveer una silla especial, para facilitar la asistencia del acusado al juicio.

Este juicio, que atrae una notoria atención tanto en Francia como en el resto del mundo y que inició el 2 de septiembre, se extenderá hasta el 20 de diciembre y tiene a 51 hombres en el banquillo, incluyendo a Pelicot, acusados principalmente de violar a Gisèle, su ahora exesposa.

Desde 2011 hasta 2020, el acusado principal suministró secretamente medicamentos a su esposa para sedarla y abusar de ella con ayuda de desconocidos contactados por internet. Los acusados podrían enfrentarse a hasta 20 años de cárcel.

En la quinta semana del juicio, el foco estará en otro grupo de siete acusados, incluido Jérôme V., de 46 años, quien visitó en seis ocasiones el hogar de los Pelicot para agredir sexualmente a Gisèle.

El juez presidente declaró que dedicará la tarde del jueves a discutir su decisión sobre prohibir la transmisión de los vídeos de las violaciones con público y periodistas presentes en la sala.

Los letrados de la víctima principal se opusieron a esta medida, siguiendo los deseos de Gisèle Pelicot de que este juicio, que se logró llevar a cabo con público presente, contribuya a que “la vergüenza cambie de bando”.

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